IBM es la más reciente empresa occidental que reduce operaciones en China
IBM recortará más de 1.000 puestos de trabajo en China, según informan varios medios de comunicación estatales, en un momento en que la tensión geopolítica entre Beijing y Washington lleva a muchas empresas mundiales a replantearse su futuro en la segunda mayor economía del mundo.
Las relaciones entre Estados Unidos y China se han deteriorado en torno a tecnologías como la inteligencia artificial (IA) y la tecnología ecológica, en parte por motivos de seguridad nacional. Algunas empresas han despedido o reubicado personal discretamente.
Yicai, un medio financiero estatal chino, informó el lunes que IBM cerrará por completo sus operaciones de investigación en el país. Entre ellas se encontraban el Laboratorio de Desarrollo de China, que abrió sus puertas hace 25 años, en 1999, y el Laboratorio de Sistemas de China.
En un comunicado enviado el martes, la empresa declinó hacer comentarios sobre el número de puestos de trabajo perdidos o si mantendría personal de investigación en China.
“IBM adapta sus operaciones según sea necesario para servir mejor a nuestros clientes, y estos cambios no afectarán a nuestra capacidad para apoyar a los clientes en toda la región de la Gran China”, dijo.
Jiemian, otro medio de comunicación estatal, escribió el lunes que los recortes de empleo —que al parecer afectaron al personal de Beijing, Shanghái y Dalian— fueron anunciados por Jack Hergenrother, un ejecutivo de desarrollo de sistemas empresariales.
Hergenrother comunicó al personal que el negocio de infraestructuras de IBM en China estaba “en declive” y que el trabajo de investigación que se realizaba en el país se trasladaría a otros laboratorios. El Wall Street Journal informó que parte del trabajo podría realizarse en los laboratorios de la empresa en India.
IBM tiene una larga historia en China: en 1934 suministró por primera vez máquinas a un importante hospital de la capital. Tras su reentrada en el mercado en 1984 a raíz de la apertura de China al mundo, el país se consideró una prioridad con un enorme potencial.
Pero en los últimos años, ese entusiasmo decayó. Se intensificó la guerra tecnológica entre las dos principales potencias económicas del mundo, lo que dificulta cada vez más a las empresas estadounidenses hacer negocios en China.
“Es una realidad que el acceso al mercado para las empresas occidentales se está restringiendo, si no cerrando, en algunos sectores de China por motivos de seguridad nacional”, dijo David Hoffman, asesor principal del Conference Board Asia.
Añadió que la informática empresarial, que se refiere a sistemas complejos utilizados por grandes organizaciones para gestionar operaciones, era una de esas áreas, especialmente porque las grandes empresas estatales y conectadas con el Estado conforman la mayor parte del mercado.
Caída de los ingresos
En el comunicado, IBM añadió que las empresas chinas, especialmente las de propiedad privada, se están centrando cada vez más en las tecnologías de nube híbrida e IA y que su estrategia consistía en atender esas oportunidades.
Después de años como un mercado en crecimiento, China ya no es el prometedor punto brillante que una vez fue para una serie de industrias. IBM dijo en su informe anual más reciente que los ingresos en el país cayeron un 19,6% el año pasado.
La noticia de IBM llega tres meses después de que Microsoft confirmara que ofreció reubicar a algunos de sus empleados en China. Los medios de comunicación estatales habían informado anteriormente que la empresa hizo esta oferta al menos a 100 empleados.
Al igual que IBM, Microsoft se ha esforzado por ganarse una buena reputación en China.
Entró en el mercado en 1992 y durante décadas contó con su influyente laboratorio de investigación, Microsoft Research Lab Asia, para ayudarle a crear influencia. Su software es utilizado por el gobierno y las empresas chinas, y Bing es el único motor de búsqueda extranjero con cierto arraigo en China.
Pero también se ha enfrentado a desafíos, ya que la geopolítica enturbia las perspectivas de negocio para las empresas estadounidenses que trabajan en investigación sobre IA y computación en la nube en China.
Según Anne Stevenson-Yang, cofundadora y directora ejecutiva de J Capital Research, hace décadas que «los incentivos chinos y la insistencia burocrática» convencieron a muchas empresas estadounidenses para trasladar la investigación al país.
“Durante mucho tiempo, el Gobierno chino presumió de ello. Ahora, el riesgo político y el riesgo de propiedad intelectual están invirtiendo esa tendencia”, dijo.
Fuente: CNN