
México vuelve a endeudarse para pagar “error” de Zedillo

A 30 años del rescate bancario originado en el sexenio de Ernesto Zedillo, el gobierno federal seguirá contratando deuda para cubrir los pagos de capital e intereses derivados de aquel episodio, que se convirtió en un lastre estructural para las finanzas públicas mexicanas.
De acuerdo con datos oficiales de la Secretaría de Hacienda, en 2025 el gobierno emitirá 254 mil 400 millones de pesos en bonos para refinanciar los pasivos del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB), organismo que sucedió al polémico Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa).
Deuda heredada desde 1995
El esquema de financiamiento del IPAB se basa en un mecanismo de refinanciamiento constante: se contrata nueva deuda para pagar la antigua, una estrategia que “patea” hacia adelante las obligaciones fiscales asociadas al rescate bancario de los años noventa.
En el primer trimestre de 2025, el IPAB ya pagó 107 mil 4 millones de pesos, de los cuales 80 mil 407 millones fueron a capital y 26 mil 597 millones a intereses. Sin embargo, en ese mismo periodo emitió 55 mil 900 millones en nueva deuda, incluyendo 36 mil millones en bonos a siete años.
Para el segundo trimestre, se prevé otra colocación de deuda por 55 mil 900 millones de pesos, con instrumentos que se extenderán hasta 2032.
Aún se adeuda más de un billón de pesos
A pesar de que desde 1995 se han pagado más de 2 billones de pesos en intereses –actualizados a precios de marzo de este año–, el saldo pendiente por el rescate bancario supera todavía el billón de pesos, según estimaciones de Hacienda y del propio IPAB.
En diciembre pasado, se informó que 239 mil 163 millones de pesos de esos pasivos vencen en 2025. No obstante, la estrategia seguirá siendo la misma: refinanciar para mantener la operación y evitar incumplimientos.
¿Quiénes ganan con la deuda del IPAB?
Desde agosto de 2022, los usuarios de Cetes Directo pueden adquirir bonos del IPAB, aunque la mayor parte de estos instrumentos siguen en manos de bancos y Afores. Así, las instituciones rescatadas hace tres décadas –aunque hoy con otros dueños, en su mayoría extranjeros– continúan recibiendo intereses derivados del endeudamiento público.
El IPAB obtiene recursos a través de:
- Cuotas de los bancos por seguros de depósito: 24 mil 400 millones en 2025.
- Presupuesto federal vía el Ramo 34: 52 mil 500 millones.
- Intereses por inversiones: 6 mil 600 millones.
Sus ingresos totales para 2025 suman 83 mil 400 millones de pesos, monto insuficiente frente a los 239 mil millones que vencen este año, lo que obliga al instituto a seguir emitiendo deuda.
De rescate bancario a deuda de mercado
En 1999, el 100% de los pasivos del IPAB eran créditos bilaterales con bancos. Para octubre de 2024, la totalidad de la deuda está compuesta por bonos en los mercados financieros, transformando el rescate bancario de una deuda institucional en un pasivo bursátil.
Fuente: La Jornada