Este sábado, decenas de líderes mundiales se reunieron en un destino turístico suizo para debatir cómo llevar la paz a Ucrania, aunque la ausencia de Rusia redujo las expectativas de un avance significativo. Tres años después del inicio del conflicto, las posiciones de las partes siguen distantes, con Ucrania exigiendo la retirada total de las tropas rusas de su territorio y Rusia manteniendo su ofensiva.

El presidente ucraniano, Volodymir Zelensky, expresó optimismo sobre las conversaciones, afirmando que “podrían hacer historia” y sentar las bases para poner fin al conflicto. Los anfitriones suizos esperaban la asistencia de más de 50 jefes de Estado y de gobierno, así como de 100 delegaciones de organismos europeos y de la ONU.

Sin embargo, la ausencia de Rusia fue un punto controvertido, ya que su presencia se consideraba crucial para cualquier avance significativo. Aunque el presidente ruso, Vladímir Putin, expuso el viernes sus condiciones para la paz, las propuestas no incluyeron nuevas concesiones y fueron calificadas por Kiev como “manipuladoras” y “absurdas”.

A la conferencia asistieron líderes de países como Reino Unido, Ecuador y Kenia, mientras que otros, como Turquía y Arabia Saudita, enviaron a sus ministros de Asuntos Exteriores. Importantes países en desarrollo, como Brasil, India y Sudáfrica, enviaron a funcionarios de menor rango, y China, que respalda a Rusia, no asistió.

Los organizadores de la cumbre presentaron tres puntos clave en la agenda: la seguridad nuclear, la ayuda humanitaria y el intercambio de prisioneros de guerra, y la seguridad alimentaria mundial. Estos temas, aunque importantes, están por debajo de las esperanzas expresadas por Zelensky en su fórmula de paz de 10 puntos, que exige la retirada de las tropas rusas y el restablecimiento de las fronteras originales de Ucrania.

En contraste, Putin desea que cualquier acuerdo de paz se base en un borrador de acuerdo de las primeras fases de la guerra, que incluía la neutralidad de Ucrania y límites a sus fuerzas armadas. El presidente ruso afirmó que ordenaría un alto el fuego inmediato si Ucrania renunciaba a ingresar en la OTAN y comenzaba a retirar sus tropas de las regiones anexionadas por Rusia en 2022.