Green Bay, Wisconsin.– Lo que parecía una coincidencia terminó convirtiéndose en todo un fenómeno hospitalario. En el HSHS St. Vincent Hospital, nada menos que 14 enfermeras del área de maternidad están embarazadas al mismo tiempo, lo que ha causado sensación entre pacientes, colegas y medios de comunicación.

El inusual caso ocurrió en el Women & Infants Center, donde las profesionales que cada día ayudan a traer bebés al mundo ahora esperan a los suyos. Algunas son mamás primerizas, mientras que otras ya tienen experiencia en maternidad, pero todas comparten la emoción (y las náuseas) de vivir esta etapa juntas.

El hospital anunció el hecho durante la Semana Nacional de las Enfermeras, calificándolo como un “momento de círculo completo”: las mismas mujeres que acompañan nacimientos, ahora recibirán a sus propios bebés en el mismo lugar donde trabajan.

Las redes sociales estallaron con mensajes de asombro y ternura, y la noticia dio la vuelta al país. “Nunca habíamos visto algo así”, expresó uno de los voceros del hospital, que ya prepara un plan para cubrir los permisos de maternidad y que la atención médica no se vea afectada.

Más allá de la logística, el ambiente en el hospital es de celebración. Las futuras mamás se acompañan, se cuidan entre sí y hasta planean una foto grupal con sus pancitas uniformadas con batas médicas.

Porque si algo quedó claro en el St. Vincent Hospital, es que la maternidad también se contagia… especialmente en la sala de partos.