En una de las movilizaciones más grandes registradas en los últimos años, agricultores, ganaderos, transportistas y ciudadanos de diversas regiones del país se manifestaron este lunes con bloqueos en carreteras federales y accesos fronterizos entre México y Estados Unidos, como parte del rechazo a la nueva Ley de Aguas Nacionales y en demanda de justicia para el campo.

Eraclio Rodríguez, dirigente del Frente Nacional para el Rescate del Campo Mexicano, informó que la protesta se extendió por prácticamente todo el territorio nacional, con participación espontánea de productores y transportistas que se unieron al movimiento aun sin estar convocados previamente. En Chihuahua, destacó que en la salida de Ciudad Juárez hacia la capital, a la altura del kilómetro 20, se registró un bloqueo masivo encabezado por transportistas; además, en Meoqui los manifestantes cerraron la carretera Panamericana, interrumpiendo el tránsito en uno de los corredores logísticos más importantes del norte del país.

Rodríguez señaló que más de un millón de transportistas se han sumado al movimiento, lo que ha generado un colapso parcial de diversas carreteras y accesos fronterizos. Afirmó que, pese a la magnitud de la protesta, el gobierno federal insiste en minimizarla calificándola como un movimiento partidista, cuando —dijo— participan productores de todas las regiones, independientemente de su afiliación política.

Las organizaciones denuncian falta de políticas públicas para atender las necesidades del sector agropecuario, así como una comercialización injusta y controlada por grandes empresas, lo cual —advirtieron— mantiene a los agricultores en condiciones de pérdida constante. Rodríguez ejemplificó el caso reciente de productores de maíz en Jalisco, Michoacán y Guanajuato, quienes, tras el anuncio de un apoyo gubernamental por tonelada, enfrentaron la reducción del precio del grano por parte de grandes procesadoras, anulando el beneficio esperado.

El dirigente acusó que estas prácticas, sumadas a la falta de reconocimiento del gobierno a los problemas estructurales del campo, llevaron al hartazgo de los productores, quienes hoy exigen un diálogo franco y respetuoso. Enfatizó que la principal demanda es detener la aprobación de la nueva Ley de Aguas Nacionales, la cual, aseguran, pone en riesgo la viabilidad de las regiones agrícolas del país y afecta directamente sus derechos históricos sobre el uso del agua.

Durante la concentración, los manifestantes lanzaron consignas y llamaron a permanecer firmes en los bloqueos durante hoy y mañana de ser necesario. “La pelota está en la cancha del gobierno”, expresó Rodríguez al reiterar la disposición del movimiento a dialogar, siempre y cuando exista voluntad para reconocer la importancia del sector agropecuario y atender las causas de fondo.

Entre los asistentes también se escucharon mensajes de padres de familia que señalaron la importancia de que las nuevas generaciones conozcan la lucha del campo y aprendan a defender sus derechos. Asimismo, reprocharon a diputados federales la aprobación de leyes que, aseguran, favorecen a intereses políticos y empresariales en detrimento de las comunidades rurales.

Al cierre del acto, las y los manifestantes reiteraron su grito principal: “¡No a la nueva Ley del Agua!”, seguido de “¡Arriba Chihuahua, arriba el campo!”, mientras se mantenían en los puntos de bloqueo.