La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, anunció dos medidas centrales para la política laboral del país: un incremento del 13 por ciento al salario mínimo y el inicio de un proceso para reducir la jornada laboral semanal de 48 a 40 horas durante el sexenio.

Sheinbaum informó que, a partir del 1 de enero de 2026, el salario mínimo general pasará de 278.80 a 315.04 pesos diarios, lo que representa un aumento significativo en el ingreso de millones de trabajadores. En la Zona Libre de la Frontera Norte, el salario mínimo quedará en 440.87 pesos diarios tras un aumento del 5 por ciento acordado para esa región.

La mandataria destacó que este acuerdo fue alcanzado mediante consenso entre el Gobierno de México, el sector empresarial y las organizaciones de trabajadores, subrayando que se trata de una decisión que fortalece la economía y mejora el poder adquisitivo de la población trabajadora.

Junto con el aumento salarial, la presidenta confirmó la presentación de una iniciativa para comenzar la transición hacia una jornada laboral de 40 horas semanales, sin reducción salarial ni afectación a prestaciones. La propuesta establece que la reducción iniciará en 2027, con recortes anuales de aproximadamente dos horas, para alcanzar las 40 horas hacia 2030.

Sheinbaum calificó estas acciones como “una muy buena noticia” para el país, al considerar que representan avances históricos en materia de derechos laborales y acercan a México a estándares internacionales de bienestar laboral. Señaló que el Gobierno Federal mantendrá el diálogo con todos los sectores para garantizar que la implementación sea ordenada, gradual y sin impactos negativos en la productividad.

Con este anuncio, la administración federal busca consolidar una política laboral basada en la justicia social, el fortalecimiento del ingreso de las familias y la mejora de las condiciones de trabajo para millones de mexicanas y mexicanos.