La infusión de té de granada, una bebida milenaria originaria de Persia, ha ganado popularidad recientemente debido a sus beneficios para la salud. Esta bebida se prepara con la piel de la granada y es conocida por su capacidad para reducir los triglicéridos y mejorar la salud cardiovascular.

Investigaciones recientes resaltan los compuestos antioxidantes y antiinflamatorios del té de granada, que pueden aliviar el dolor e irritación en la garganta, haciéndolo una opción natural para combatir infecciones e inflamación en esta área.

El té de granada también posee propiedades diuréticas que ayudan a regular la presión arterial y mejorar los perfiles lipídicos al reducir los triglicéridos y aumentar el colesterol HDL, conocido como el “colesterol bueno”.

Los beneficios de la infusión se extienden a la salud bucal, donde sus propiedades antimicrobianas y antiinflamatorias pueden prevenir y tratar afecciones como la gingivitis y la periodontitis.

Además, el té de granada es beneficioso para el tracto gastrointestinal, gracias a sus propiedades astringentes y antiinflamatorias, que pueden aliviar los síntomas de diarrea y disentería.

Asimismo, esta infusión puede ayudar a reducir la inflamación y el dolor asociados con la artritis y la gota, mejorando la calidad de vida de quienes padecen estas condiciones.

En resumen, el té de granada ofrece diversos beneficios para la salud del organismo, desde la reducción de inflamación hasta la mejora de la salud cardiovascular y gastrointestinal.