La Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones (Conasama) de la Secretaría de Salud alertó sobre el preocupante consumo de fentanilo con fines no médicos, destacando tanto su potencial adictivo como el alto riesgo de sobredosis.

En el Informe de la demanda y oferta de fentanilo en México se señala un aumento en los casos de atención por consumo de este opioide: de 333 en 2022 a 430 en 2023, representando un incremento del 39 por ciento.

Los estados del norte del país, especialmente Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Sinaloa y Sonora, concentran la demanda de fentanilo ilícito y también son donde se han realizado la mayoría de los decomisos, según el Esfuerzo Nacional en el Combate al Narcotráfico y Actividades de Seguridad Pública. Chiapas también figura entre los principales estados en decomisos.

Los expertos advierten que el consumo de fentanilo ilícito conlleva el riesgo de intoxicación aguda y sobredosis, ya que es difícil saber la cantidad contenida en una dosis y si puede ser fatal.

En Estados Unidos, el fentanilo fue responsable de 80,411 muertes por sobredosis secundarias al uso de opioides en 2021. En México, los opioides causaron la muerte de 114 personas de 2013 a 2022, la mayoría en Sonora.

La Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones enfatizó la necesidad urgente de implementar acciones de reducción de daños a nivel municipal y estatal en las áreas con mayor proliferación de casos de consumo de fentanilo.