El presidente de Estados Unidos, Donald J. Trump, anunció a través de sus redes sociales que sostuvo una llamada telefónica de dos horas con el presidente ruso Vladimir Putin, en la que, según sus declaraciones, se acordó iniciar de inmediato negociaciones entre Rusia y Ucrania para alcanzar un alto al fuego y, eventualmente, el fin del conflicto armado.

Trump señaló que las condiciones del posible acuerdo serán discutidas únicamente entre ambas partes, enfatizando que el tono y espíritu de la conversación con Putin fueron “excelentes”. Además, aseguró que Rusia busca entablar comercio a gran escala con Estados Unidos una vez finalizada la guerra, lo que, a su juicio, representa una oportunidad económica “ilimitada” tanto para Rusia como para Ucrania en su proceso de reconstrucción.

El exmandatario informó que notificó de esta iniciativa al presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, así como a líderes europeos como Ursula von der Leyen, Emmanuel Macron, Giorgia Meloni, Friedrich Merz y Alexander Stubb. También mencionó que el Vaticano, a través del Papa, ha manifestado su interés en ser sede de las negociaciones.

El anuncio ha generado reacciones divididas en el ámbito internacional, ya que se produce en un contexto de continuas tensiones diplomáticas y sin un respaldo oficial de las actuales autoridades estadounidenses.