Estados Unidos cancela el TPS para Nicaragua y Honduras: miles quedarían expuestos a la deportación

Estados Unidos cancela el TPS para Nicaragua y Honduras: miles quedarían expuestos a la deportación

El Gobierno de Estados Unidos anunció la cancelación del Estatus de Protección Temporal (TPS) para ciudadanos de Nicaragua y Honduras, un beneficio que ha permitido a miles de personas residir y trabajar legalmente en territorio estadounidense desde 1999, tras el devastador paso del huracán Mitch.

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) justificó la decisión señalando que “las condiciones en ambos países han mejorado lo suficiente como para permitir el regreso seguro de sus ciudadanos”. La cancelación entrará en vigor en un plazo de 60 días, tras los cuales los beneficiarios del TPS quedarán expuestos a la deportación, salvo que cuenten con otra forma de protección legal.

Según datos oficiales, la medida afecta a alrededor de 72,000 hondureños y 4,000 nicaragüenses que viven bajo este estatus en EE. UU. desde hace más de dos décadas. A los beneficiarios que decidan regresar voluntariamente se les ofrecerá un boleto aéreo gratuito y un apoyo económico de mil dólares.

El TPS fue otorgado en respuesta a la emergencia humanitaria provocada por el huracán Mitch, que causó cerca de 7,000 muertes en Honduras y 4,000 en Nicaragua, además de una destrucción masiva de infraestructura. Desde entonces, el estatus ha sido renovado periódicamente.

Un portavoz del DHS afirmó que “el TPS nunca estuvo pensado para durar un cuarto de siglo”, y sostuvo que en ambos países las secuelas del desastre natural ya no existen.

La cancelación ha generado fuertes reacciones entre organizaciones y opositores. En el caso de Nicaragua, el activista exiliado Gabriel Putoy calificó la decisión como “poner a los nicaragüenses en manos del dictador Ortega”, argumentando que la persecución política y las violaciones de derechos humanos persisten.

Desde 2018, cuando estallaron protestas contra el régimen de Daniel Ortega, más de 600,000 nicaragüenses han emigrado, la mayoría a Costa Rica, según datos de organismos internacionales. En 2023, el gobierno de Nicaragua expulsó a 222 presos políticos, quienes posteriormente fueron despojados de su ciudadanía.

Putoy subrayó que “el verdadero huracán que enfrentan los nicaragüenses hoy no es el climático, sino el político”, y lamentó que bajo la actual Administración Trump, las opciones de protección humanitaria se hayan reducido drásticamente.

En Honduras, organizaciones como Amigos de Honduras señalaron que las condiciones siguen siendo difíciles, con alta inseguridad, presencia de pandillas, y efectos severos del cambio climático que han afectado la agricultura, forzando a miles a emigrar.

La Coalición de Inmigrantes de la Florida (FLIC) advirtió que esta decisión “devastará a miles de familias que han echado raíces en Estados Unidos, criando hijos, trabajando y contribuyendo a sus comunidades”.

“La Administración Trump debería crear un camino hacia la residencia permanente para estas personas, en lugar de destruir sus vidas y arrancarlas de raíz”, señaló FLIC en un comunicado.

La cancelación del TPS para Nicaragua y Honduras se suma al reciente anuncio del fin de esta protección para 500,000 haitianos y, previamente, 350,000 venezolanos. Algunas de estas medidas han sido bloqueadas temporalmente por jueces federales, aunque la Corte Suprema ha respaldado el derecho del Gobierno a poner fin al programa.

Fuente: El País